En el proceso de avance de una pyme hasta la posibilidad de comenzar a escalar y aumentar su tamaño, debemos, sobre todo en las nuevas empresas, contemplar el proceso entre Startup y Scaleup.
Se trata de un proceso natural, que alcanza sólo a un porcentaje determinado de las empresas de nueva creación, pero que no siempre se distingue de manera clara. Esto puede llevar a que se tomen decisiones precipitadas, o, también, a que no se tomen las decisiones adecuadas para acompañar a la evolución de la empresa.
Hay que valorar en primer lugar que no va a existir un factor único para poder determinar si nuestra empresa está en condiciones de escalar o no.
Hay algunos baremos. Por ejemplo, en general se considera que cuando la empresa presenta un crecimiento superior al 20% o más durante los tres primeros años de vida podría estar ya en proceso de escalado.
También hay ciertas cantidades económicas que, una vez superadas en cuanto facturación, pueden señalar la misma tendencia. Por ejemplo, se suele señalar la cifra de 1.000.000 $ como una de estas cantidades frontera entre una entidad que está escalando y las que no. Sin embargo, en el tema de la facturación conviene ser más cautos ya que entran en juego otros valores como el tipo de venta, los márgenes, etc.
También es importante valorar los recursos humanos de la empresa. No sólo desde el punto de vista del crecimiento del número de empleados, sino también de sostenimiento de los empleados y la retención de talento. Estas son señales interesantes a valorar.
Claves para entender si una empresa está escalando
Además de todo lo anterior hay otras señales interesantes a tener en cuenta. Vamos a valorar las principales:
Crecimiento
Cuando las previsiones de crecimiento se han superado, incluso rebasando las previsiones de la fase inicial, es probable que tu empresa está comenzando a esta mi situación de escalar.
Aquí hay que prestar mucha atención a la relación entre el proyecto inicial y la evolución de crecimiento que la empresa presenta. El porcentaje de crecimiento, ya lo hemos citado, podría rondar a un crecimiento sostenido por encima del previsto en torno al 20% durante al menos tres ejercicios.
La estructura interna
En la valoración de la estructura interna no se incluye exclusivamente crecimiento del número de empleados, o la retención de talento que hemos citado anteriormente. Siendo esto importante, hay otros factores.
Probablemente el principal factor es el de la valoración de la relación entre la estructura interna y funcionamiento de la empresa. Cuando la estructura interna funciona de manera equilibrada, es capaz de responder a los desafíos y a funcionamiento cotidiano, la empresa está en buena dirección.
Si esto va acompañado de retención de talento y de captación e incorporación de nuevo talento, es una señal muy valorable de escalada en la empresa.
Interés y colaboraciones
Aunque puede parecer un aspecto subjetivo, y por sí mismo no indicaría realmente nada, si es cierto que el interés que puede despertar la empresa en otras compañías (fundamentalmente cuando se trate de grandes compañías) es un aspecto valorable y muy importante a la hora de saber si tu pyme está escalando.
Se debe prestar atención a las solicitudes de colaboración, al interés en la participación o incluso la compra de accionariado.
