Si fuiste despedido recientemente o perdiste tu trabajo por otra razón, es posible que te preguntes cómo vas a llegar a fin de mes. Navegar por la pérdida de un trabajo puede ser aterrador y estresante, y averiguar cómo pagar las facturas del próximo mes también es preocupante. De hecho, es normal sentir ansiedad y miedo. Quizás también te estés preguntando acerca de pedir un préstamo para cubrir tus gastos.
Solicitar un préstamo personal
Para solicitar un préstamo personal, normalmente deberás proporcionar información sobre tus finanzas y, lo que es más importante, información sobre tus ingresos. La compañía de préstamos también esperará que te sometas a un informe de crédito. El prestamista revisará tu información para determinar si califica o no para el préstamo.
¿Qué pasa si estoy desempleado?
Obtener un préstamo cuando estás desempleado es complicado y puede que no sea posible. El criterio número uno que los prestamistas consideran cuando evalúan tu solicitud de préstamo es la capacidad para pagar el préstamo a tiempo. Si no tienes ingresos, es una apuesta extremadamente arriesgada y es probable que la rechacen. Eso hace que los prestamistas tradicionales, como un banco o una cooperativa de crédito, sean una opción poco probable para un préstamo personal.
Sin embargo, todavía puede ser posible obtener un préstamo personal. Si tienes un crédito excelente y alguna fuente de ingresos, como manutención infantil, pensión alimenticia, discapacidad, ingresos por alquiler u otra cosa, aún puedes tener una oportunidad.
Pero si no tienes ningún ingreso, es posible que te limites a usar tu propiedad como garantía para obtener un préstamo. Eso significa que puedes estar limitado a préstamos sobre el título o préstamos de empeño. Con un préstamo sobre el título, estás utilizando el título de tu automóvil como garantía. Con un préstamo de empeño, el artículo de valor que ofrece a la casa de empeño, como joyas o productos electrónicos, sirve como garantía del préstamo. En ambos escenarios, no pagar la deuda en el tiempo requerido puede resultar en la pérdida de su propiedad. Ambos tipos de préstamos son extremadamente riesgosos.
La conclusión es que obtener un préstamo mientras estás desempleado es casi imposible. Si tienes ahorros, ahora es el momento de recurrir a esos fondos. Eso incluye el uso de ahorros para la jubilación, aunque debe evaluar los riesgos de agotamiento o préstamo contra tu jubilación . La siguiente mejor opción es usar tu tarjeta de crédito si tienes una. Es mejor usar el límite de crédito disponible que tratar de obtener fondos a través de un préstamo. Usar una tarjeta de crédito también puede ser preferible a tocar productos de ahorro y jubilación.
